Unos 600 agentes velarán por la seguridad en las carreteras durante la 103 Volta a Catalunya

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Unos seiscientos agentes de los Mossos y las policías locales velarán por la seguridad en las carreteras y habilitarán los desvíos necesarios durante la celebración de la 103 edición de la Volta Ciclista a Catalunya, que comienza mañana y finalizará el 24 de marzo, jornadas en las que los ciclistas recorrerán unos 1.200 kilómetros.

Según han informado el Servei Català de Trànsit y los Mossos, el citado servicio comunicará en tiempo real las afectaciones que provoque la prueba en las cuatro provincias catalanas en su web con la información que proporcionará un vehículo suyo incrustado en la caravana de la organización.

Trànsit explica que, por sus características, las principales afectaciones se darán en las carreteras secundarias aunque puntualmente se puede registrar alguna en la red principal, y precisa que los horarios estimados de cierre de viales o desvíos habilitados son orientativos, ya que dependerá del desarrollo de la prueba.

En cualquier caso, todas las vías por las que discurra la Volta estarán cerradas al tráfico cuarenta minutos antes de la prueba y otros cuarenta después del paso de los ciclistas.

Trànsit, en coordinación con los Mossos, habilitará medidas especiales para el desarrollo de la Volta.

Para mañana lunes, en la que la prueba se desarrollará en Sant Feliu de Guíxols (Girona), se cortará para los dos sentidos de la marcha la C-31 hacia la GIV-6621 y hacia la C-65, con cortes en las salidas de la Nacional-II para acceder a la variante de Girona y hacia la GIV-6703 (carretera Dels Àngels).

El martes, con una etapa que discurrirá entre Mataró y Vallter, se desviará el tráfico procedente de la salida de la C-32 hacia Calella por el interior de la población para evitar que llegue a la Nacional-II, por donde pasará la prueba.

Para el miércoles, cuando la prueba irá de Sant Joan de les Abadesses a Port Ainé, no están previstas medidas especiales, mientras que para el jueves, con una etapa que empezará en Sort y acabará en Lleida, se cortará la salida 487 de la A-2 en sentido a Zaragoza.

El viernes, cuando la quinta etapa de la prueba recorrerá el tramo entre Altafulla y Viladecans, se cortará la salida 26 de la autopista AP-7 en todos los sentidos de la marcha, con corte también en la salida 7 de la B-24, también en todos los sentidos de la marcha, y en la salida 50 de la C-32 en los dos sentidos.

El sábado, día 23, la etapa discurrirá entre Berga y Queralt, y en principio no hay prevista ninguna medida especial mientras que para la etapa final del domingo, en la ciudad de Barcelona, se cortará la C-31 en el kilómetro 199, en sentido a la capital catalana, y se desviará todo el tráfico hacia la rotonda de la plaza de Cerdà.

También se cortará ese día el acceso lateral de la A-2 en los dos sentidos de la marcha para acceder a la C-245 y la salida 7 de la B-24 para impedir que el tránsito discurra por la N-340. Además, en esta misma vía se desviará el tráfico en el kilómetro 4,2, en sentido a Tarragona, hacia una rotonda elevada para hacer el cambio de sentido.

Se restringirá, igualmente, el paso por la salida 44 de la C-32 en sentido Barcelona para impedir el tránsito por la C-31 y se cerrará la salida 6 de la B-22, en sentido a la capital catalana.

No obstante, se podrá circular por la C-31 en sentido Tarragona hasta la Terminal T-2 y la C-32, pero no por la primera carretera en dirección a Barcelona.